Distintas maneras de conocer el futuro

A lo largo de la Historia se ha utilizado una sorprendente variedad de objetos naturales y acontecimientos como medios de adivinación del futuro. La siguiente lista contiene algunas de las formas de profecía más corrientes y curiosas.

Aeromancia mediante la observación de los fenómenos atmosféricos. Alectomancia mediante la utilización de gallos. Alfitomancia mediante la ingestión de una tarta de centeno cocinada de manera especial. Austromancia mediante el estudio de los vientos. Botanomancia mediante el encendido de ramas de verbena o brezo blanco. Calcomancia mediante la interpretación de los tonos que se obtienen golpeando recipientes de cobre o latón. Ceromancia mediante la observación de las figuras que forma la cera derretida al mezclarse con agua. Cresmomancia mediante el lenguaje de una persona que desvaría. Cromniomancia mediante la observación del crecimiento de unas cebollas especialmente preparadas. Dafnomancia mediante el sonido que producen las hojas de laurel al ser quemadas. Enomancia mediante el color, el aspecto y el sabor de los vinos. Escapulomancia mediante las marcas en los omóplatos de un animal. Esciomancia mediante el tamaño, la forma y los cambios de aspecto en las sombras en los muertos. Esplancomancia mediante el examen de las vísceras de animales sacrificados. Felidomancia mediante la conducta y las acciones de los gatos. Filorodomancia mediante el ruido de los pétalos de rosa al ser estrujados entre las manos. Floromancia mediante el estudio de las flores o las plantas. Gelomancia mediante la interpretación de la risa histérica. Giromancia mediante los murmullos de los que están exhaustos después de una danza ritual. Halomancia mediante el lanzamiento de sal al fuego. Hipomancia mediante la observación del modo de andar de los caballos durante procesiones ceremoniales. Ictiomancia mediante la observación de los peces, vivos o muertos. Litomancia mediante el reflejo de una vela en piedras preciosas. Lincomancia mediante la observación de las llamas de tres velas que formen un triángulo. Macaromancia mediante espadas, dagas y cuchillos. Margaritomancia mediante la acción de una perla encantada en un recipiente cerrado. Metapomancia o Metoposcopia mediante las líneas de la frente de una persona. Miomancia mediante los sonidos, acciones o apariciones repentinas de ratas y ratones. Nefelomancia mediante el movimiento y la forma de las nubes. Ofiomancia mediante el estudio de las serpientes. Onfalomancia mediante la contemplación del propio ombligo. Onicomancia mediante el reflejo del sol en las uñas. Oniromancia mediante la interpretación de sueños y visiones nocturnas. Ovomancia mediante la observación de las formas que adopta la clara de huevo al ser vertida en el agua. Podomancia mediante el estudio de las plantas de los pies. Selenomancia mediante las fases y el aspecto de la luna. Sicomancia mediante el secado de hojas de higuera. Sideromancia mediante las forma que adopta la paja seca al ser vertida en hierro caliente. Tiromancia mediante la coagulación del queso. Transtaumancia mediante acontecimientos vistos u oídos por casualidad. Uromancia mediante el examen de la orina. Xilomancia mediante la interpretación de ramas caídas de los árboles o de las posiciones de los troncos al arder en una hoguera. Zoomancia mediante leyendas de animales imaginarios, como los monstruos marinos.