Afirman que un gran número de experiencias sobrenaturales acontecen en o cerca de colinas, dólmenes, círculos de piedra, altares paganos de la prehistoria e iglesias medievales que formarían unas extraordinarias alineaciones. Es elevada la casuística de los que han visitado estos lugares y que han tenido, por ejemplo, apariciones de personajes históricos representando otra vez las hazañas que realizaron en vida. Otros afirman sentir la presencia física de una extraña fuerza que no pueden ver ni identificar, pero que les eleva del suelo, o les golpea, o les empuja influyendo de un modo inexplicable en su estado de ánimo. Nadie puede explicar las causas de estos sucesos, a pesar de los esfuerzos, entre otros, de estadistas, ingenieros, zahoríes, aficionados a los OVNIS, espiritistas y astroarqueólogos. Algunos investigadores creen que estas alineaciones se hallan situadas a lo largo de canales de energía geofísica. Sospechan que los antepasados percibían una energía vibrante que fluía por la tierra y construían sus monumentos en lugares donde esta energía era más intensa. Otros creen que las intersecciones de estas alineaciones forman nodos que, según ellos, son puestos donde la energía es especialmente intensa y origina fenómenos psíquicos. Las explicaciones de estos episodios son confusas, pero es cierto que en estas alineaciones han tenido lugar numerosas experiencias psíquicas.
Joyce Bowles, un trabajador de la Winchester Railway Station, se dirigía en coche, con su vecino Ted Pratt, hacia el pueblo vecino de Chilcomb la noche de un domingo en noviembre de 1976, para ir a buscar a su hijo Stephen. De repente, el auto sufrió una violenta sacudida y volcó sobre la hierba al lado de la vía. Las luces delanteras se apagaron y el motor se detuvo.
Joyce y su pasajero miraron por la ventana y vieron una nave en forma de cigarro de color naranja brillante suspendida sobre la carretera. A través de las ventanas pudieron ver tres cabezas alineadas como los pasajeros de un autobús. Luego, una de las figuras emergió de la nave y se acercó al coche. Tenía unos ojos rosas penetrantes sin pupilas ni iris y llevaba un uniforme plateado. "Se quedó mirando los mandos del coche a través de la ventana", explicó Joyce. Sin más, el motor volvió a la vida y las luces del coche se encendieron otra vez. "Entonces, tanto él como la nave se desvanecieron". Algunos estudiosos sostienen que estas alineaciones desprenden unas fuerzas energéticas especiales procedentes de la Tierra que atraen seres del espacio no identificados. En cualquier caso, dos de estas alineaciones de antiguos cementerios que empiezan en Old Winchester Hill convergen en Chilcomb Road, cerca del lugar donde Joyce Bowles y Ted Pratt afirmaron haber tenido este peculiar encuentro.
En otro suceso anterior, durante una tarde de agosto del año 1936, Stephen Jenkins, un joven adolescente de 16 años, se hallaba dando un paseo por Loe Bar, un lugar de la costa de Cornualles cerca de donde se dice que murió el rey Arturo. De repente, Stephen se sorprendió al ver un ejército de soldados medievales con vestidos de mallas delante de él. Llevaban capas rojas, blancas y negras; los caballos iban tan engalanados como sus jinetes. Un soldado, con las manos sobre la espalda, se hallaba de pie mirando fijamente hacia Stephen. Éste dio un paso hacia delante para observar más de cerca la escena, pero al hacerlo el ejército desapareció tan rápidamente como se había presentado. Esta experiencia individual era difícil de creer. Pero cuando Stephen regresó al lugar 38 años más tarde, esta vez con un mapa en la mano y acompañado de su esposa, ante sus ojos apareció la misma imagen desvaneciéndose con idéntica rapidez. Aunque parezca increíble, su esposa tuvo la misma visión.
La explicación de Stephen es que unos soldados fantasmas vagan por los campos de Cornualles y se hacen visibles debido a la energía psíquica que emana de los nodos, o intersecciones, de las líneas cercanas. Loe Bar se halla situado en una línea que va desde Landewednack Church (iglesia), pasando por Breage Church (otra iglesia), hasta el cruce de otras dos líneas en Towshend (varios túmulos). Más sorprendente si acaso fue lo ocurrido en Chanctonbury Ring, un antiguo terraplén en forma de círculo coronado por un anillo de hayas, situado en una colina en la costa sur de Inglaterra.
Con anterioridad había sido un fuerte anglosajón, escenario de cruentas batallas. Se halla en una intersección nodal de cinco líneas, una en dirección oeste pasados varios túmulos hasta los terraplenes de Rackham Banks, otra en dirección norte hacia Nun's Well (donde se hallan el Castillo de Knepp, el Castillo de Sedgewich y la llamada Fuente de la Monja) y otras tres en dirección este hacia Poynings Church (iglesia), otra Iglesia en Steymings, Devil's Dyke (el dique del Diablo) y Kingston Church (iglesia).
La noche del 25 de agosto de 1974, William Lincoln se dirigió hacia el lugar con tres amigos, atraídos por los relatos de los numerosos sucesos ocurridos en la zona.
Aproximadamente a las once, cuando entraban en la oscuridad del anillo de árboles, Lincoln consiguió más de lo que jamás hubiese deseado. Sin previo aviso, explicarían más tarde sus compañeros, fue agarrado por una fuerza invisible y elevado a una altura de metro y medio del suelo quedando suspendido horizontalmente durante medio minuto o más de tiempo antes de caer a tierra. Ni él ni sus amigos vieron nada que pudiera justificar tal levitación, pero guardan un recuerdo del extraño suceso en forma de documennto ya que uno de los compañeros de Lincoln tuvo la serenidad de poner en marcha una grabadora en la que puede oírse la aterradora voz de Lincoln y sus estupefactos compañeros de experiencia suplicando, a no saben bien qué, que le soltasen.
